El
26 de Diciembre de 2008 a las 15:30 h nos enteramos del fallecimiento
de David por mediación de terceras personas, su cuerpo tardó varias
horas en entregársenos.
El cadáver
apareció vestido. Después de la autopsia se destruyó la ropa que llevaba
y, pese a nuestra insistencia, nunca llegaron a dárnosla.
Se nos
entregaron sus objetos personales por mediación de un empleado del
tanatorio, no de la policía. En los efectos personales no estaba su
cartera, ni las fotos familiares que llevaba él siempre consigo, ni su
inseparable gorra, ni sus playeros, cosas que directamente llegaron a
aparecer en el tanatorio.
Allí
estuvimos en todo momento agobiados por varios miembros de la policía
secreta. La policía local no permitía a la gente acceder al recinto para
darnos el pésame, pero sin embargo permitía el libre acceso de
periodistas y cámaras de radio y televisión, algunos incluso intentaron
grabar el cuerpo de David a lo que rotundamente negamos nuestra
autorización.
En el
tanatorio nos informaron de la negativa por orden judicial a la
incineración de los restos mortales de David, noticia que apareció
posteriormente publicada en los periódicos. Ningún de sus seres cercanos
llegamos nunca a ver es dicha orden.
Al día
siguiente, 27 de diciembre de 2008, se procedió a hacerle la autopsia y a
la filmación de la misma en el propio tanatorio, sin enseñarnos tampoco
la supuesta orden judicial que acreditaba dicho procedimiento.
En aquel
preciso momento solicitamos hablar con la forense. Nos respondieron que
aquello era imposible, que “la forense viene, hace su trabajo y se va” y
que, legalmente, teníamos que esperar 15 días para recoger en el
juzgado los resultados de la autopsia, ya que la forense no recibe.
Al
rato, alrededor de hora y media después, la misma persona con la que
habíamos hablado previamente nos avisó de que podíamos reunirnos para
hablar con la forense. No podemos asegurar que fuese realmente la
forense, ya que en ningún momento se acreditó como tal. Posteriormente y
según observamos en los papeles de la autopsia pudimos comprobar que
habían ejercido dos forenses y no una. La forense achacó el
fallecimiento de David a causas naturales.
Cuándo recogimos el informe de la autopsia en el juzgado aparecía lo siguiente:
“La posible
causa del fallecimiento fue debida a un edema pulmonar agudo. Posible
hora del fallecimiento alrededor de las 14:00h”. Posteriormente a la
autopsia se enviaron muestras de orina, tejidos y órganos al Instituto
Nacional de Toxicología de Madrid donde concluyen que: “Falleció por una
reacción adversa al Metasedyn 30 medico legal-accidental”.
Cabe
destacar que el Metasedyn 30 (Medicamento narcoléptico de naturaleza
opiácea cuyo principal activo es la metadona) le fue recetado durante el
reconocimiento médico posterior a la detención alrededor de las 6.30h
de la madrugada en un centro médico cercano a la comisaría por la médica
que se encontraba de guardia.
Durante las
semanas posteriores al fallecimiento de David la prensa local llegó a
achacar el fallecimiento de David a cinco causas diferentes: Muerte
súbita, muerte natural, drogas, enfisema pulmonar y a un paro cardiaco.
La
prensa nos ha hecho mucho daño desde el principio, en todo momento
hicieron la labor de portavoces del juzgado y la policía sin contrastar
su visión de los hechos con nosotros.
Llegaron
a publicar una foto del hijo de David de cuando era bebé sin ningún
tipo de autorización familiar. Se publicó una foto de David tomada en el
muro de la playa de Gijón cuando volvía con su padre del rastro tomada
tres días antes (23/12/08) de su fallecimiento, cosa que nos ha
impactado en todo momento.
Cuando
empezamos las manifestaciones y concentraciones por el esclarecimiento
de los hechos (Febrero de 2009) se presenciaban en los actos y se hacían
eco de los mismos.
Hicimos
entrevistas para la televisión autonómica, la radio, y un periódico
“independiente”, pero al cabo de unos meses la noticia dejó de carecer
de morbo para el circo mediático.
Durante
la lucha particular que iniciamos por nuestra cuenta y riesgo
totalmente carentes de conocimientos sobre las escasas posibilidades que
teníamos de hace justicia se nos acercaron personas de diferentes
colectivos e instituciones, entre ellas pertenecientes a La plataforma
por las libertades, CSI (Corriente sindical de Izquierdas) y Presos
Galicia.
También
nos pusimos en contacto con la asociación de vecinos de Moreda y se nos
acercaron integrantes de la Coordinadora Antifascista de Asturias y
posteriormente formamos un grupo de apoyo.
El
interés de pelear y querer hacer de estos colectivo se fue poco a poco
diluyendo entre palabrería y falsas promesas, salvo en el caso de Presos
Galicia, que nos ayudaron desde un principio en lo referente a temas
burocrático-legales y en la redacción de la denuncia contra la comisaría
de policía de Gijón.
Seguimos manteniendo cierto contacto entre nosotros a día de hoy, pero la distancia geográfica ha sido un lastre en su apoyo.
El
5 de Febrero de 2009 pusimos una denuncia en el Juzgado de Instrucción
Nº 2 de Gijón como acusación acusación particular por “Homicidio
involuntario y denegación del deber de socorro”. Esta denuncia fue
archivada a los 15 días. El caso fue cerrado “provisionalmente a la
espera de pruebas” a mediados de Junio de 2009 tras pasar por la
audiencia provincial y el tribunal constitucional, dónde interpusimos un
recurso de apelación que no prosperó. No podemos presentar pruebas
porque se han destruido.
Desde el
09/02/09 hasta el 26/12/10 hicimos una concentración cada mes. El
13/05/09 fuimos a Madrid con Presos Galicia y familiares de personas con
casos similares al de David bajo el lema “Queremos saber de como
murieron nuestro hijos” a protestar delante del tribunal constitucional a
la espera de respuestas.
El
desgaste psicológico, físico y emocional unido a la práctica nulidad de
la respuesta de la gente nos hizo finalizar nuestras reivindicaciones y
protestas para evitar destruirnos totalmente.
Los
seguimientos policiales fueron apabullantes desde el primer momento,
provocando daños significativos en la vida de mi hija y forzándola a
marcharse lejos de Asturias.
Aunque de menor intensidad, seguimos sufriendo seguimientos a día de hoy.
Meses atrás
hemos retomado el tema desde la frialdad y la distancia. Nos hemos
propuesto dar charlas sobre el caso para sensibilizar a la gente con
nuestras experiencias al respecto. Es de lo poco que podemos hacer, ya
que vemos la reapertura del caso inviable dada, entre otros factores,
nuestra precariedad de medios económicos y la reciente reforma del
código penal que nos obligaría a asumir los gastos y las tasas
judiciales, y después de haber perdido a nuestro hijo no queremos
financiar de este modelo de justicia en el que nunca creímos ni
creeremos.
Queremos
agradecer esta oportunidad de difusión a los responsables del Boletín
Tokata y a vosotros el tiempo que habéis dedicado a su lectura. Dejamos a
vuestra disposición nuestros contactos y el enlace para firmar por la
reapertura del caso para el que necesitamos 5000 firmas. Un abrazo a
todas y todos y gracias por vuestro apoyo.
Begoña y Fernando, padres de David.
Contacto: reaperturadavidblanco@hotmail.com
extraido de Boletin Tokata
Ningún comentario:
Publicar un comentario