El titular del juzgado de Instancia e
Instrucción número 3 de Maó ha ordenado la suspensión del proceso
judicial abierto tras la denuncia presentada por los familiares de
Carlos Silva Cortés, el preso que supuestamente intentó suicidarse en el centro penitenciario de Menorca y que falleció una semana después de este hecho.
La razón principal es que el juez se ha
inhibido en el caso, pues “mantiene una relación de amistad íntima con
el director del centro penitenciario, así como de la subdirectora, al
ser personas que integran mi círculo de relaciones sociales en la isla”.
Afirma que “mantengo una estrecha amistad lo que supone que esta
persona [el director] acuda frecuentemente a mi domicilio a comer; vamos
juntos a cenar en compañía de otros funcionarios del centro;
organizamos excursiones para ir a la playa, etc”. La familia solicitó la declaración del director en su escrito de diligencias previas para investigar el caso.
Por ello trasladó el caso a su sustituto
ordinario, que es el titular del juzgado número 2. Pues bien, este
también ha decidido inhibirse y ahora el caso está pendiente de la
Audiencia Provincial de Palma para que dictamine un magistrado
competente para llevar el caso.
Mientras no resuelva la Audiencia
Provincial, hecho del que pueden pasar varios meses, el titular del
juzgado número 3 ha ordenado, mediante una providencia, “suspender el
curso del proceso” ya que considera que “no existen diligencias cuya
demora pueda perjudicar el curso de la investigación”.
Menorcaaldia.com
extraido de boletin tokata
Ningún comentario:
Publicar un comentario